La Superintendencia de Bancos señaló que, pese a los efectos de la pandemia de Covid-19, el sistema financiero dominicano mantiene indicadores saludables. En octubre 2020, sus activos reflejaron un crecimiento interanual de 21 %, alcanzando los RD$ 2.3 billones., indicó la institución en un comunicado.
La cartera de créditos, que aumentó 7 % en el último año, no cesó de crecer durante la pandemia. De hecho, se expandió 4.6% entre marzo y octubre del año en curso.
La morosidad interanual del sistema se incrementó de 1.7 % a 2.1 %. A pesar del aumento, la perspectiva histórica permite clasificarla como baja. Actualmente, por cada 100 pesos de créditos en mora, el sistema bancario cuenta 173 pesos en reservas, un aumento de 15 % con relación a octubre 2019.
El 83% de los pasivos corresponde a los depósitos del público. Estos pasaron de RD$1.50 billones a RD$1.77 billones, para un crecimiento interanual superior al 18 %. Es importante destacar que los depósitos de las familias y hogares representan el 58.1 % del total, mientras que los de las empresas del sector real alcanzan el 26.3 %. Ambos aumentaron su participación relativa en 0.4 % y 2 %, respectivamente.
En tanto, las tasas de interés se ubican en el rango más bajo de la historia contemporánea. La pasiva cerró el mes de octubre en 2.9 % (promedio ponderado anual), mientras la activa cayó en torno al 10 %.
En este contexto, la liquidez se mantiene en niveles históricamente elevados. Los fondos disponibles del sector pasaron de RD$287 mil millones a RD$396 mil millones, para un crecimiento interanual de 38 %.
La tasa de dolarización del sistema permanece sin cambios relevantes. A octubre de 2020, los pasivos de la banca en moneda extranjera representaban el 31 % del total, valor que, pese a la aceleración en la apreciación del dólar durante la primera mitad del año, solo dista dos puntos del 29 % registrado en octubre de 2019.
La solvencia de la banca dominicana se posicionó en 20.4 % , reflejando un alza significativa con respecto a octubre de 2019 (16.8 %). El componente más importante en la variación del patrimonio del sistema es el aumento del capital por un monto de RD$28,000 millones. Esto incluye alrededor de RD$20,000 millones por concepto de capitalización de utilidades y RD$8,000 millones por nuevos aportes.
La rentabilidad del sector bancario muestra una reducción interanual. El Retorno sobre Activos (ROA) y el Retorno sobre el Capital (ROE) se ubicó en 1.9 % y 16.8 %, respectivamente, mientras que en octubre de 2019 estos indicadores eran de 2.4 % y 20 %.
Flexibilización regulatoria y facilidades otorgadas por las entidades
La flexibilización regulatoria, los estímulos de política monetaria y las facilidades otorgadas por la banca dominicana a sus clientes explican parte de su posición saludable en el contexto de la pandemia de COVID-19.
El 82 % de la cartera de créditos de la banca múltiple está sujeta al tratamiento regulatorio especial, y RD $ 729,950 millones fueron objeto de diferimiento de cuotas (57 % del sistema).
Al mes de octubre, el diferimiento de pagos alcanzó 92 % de los casos. Hasta la fecha, este segmento no ha confrontado mayores problemas, pues la morosidad se ha mantenido reducida.
No obstante, es necesario considerar que en la transmisión de los efectos de la economía real al sector financiero existe un rezago natural. Las medidas de flexibilización han hecho que este sea más prolongado, en correspondencia con la intención de las autoridades monetarias de evitar que una crisis económica se convierta en una crisis financiera.
Finalmente, todavía existe una gran incertidumbre con relación al futuro, y especialmente con respecto a lo que ocurrirá en el año 2021 en el sector financiero. La constitución sostenida de nuevas provisiones podría asociarse a que el sector prevé mayores niveles de pérdidas en 2021, y evidencia señales de prudencia de las entidades.
Fuente: Diario Libre[:en]The Superintendency of Banks pointed out that, despite the effects of the Covid-19 pandemic, the Dominican financial system maintains healthy indicators. In October 2020, its assets reflected a year-on-year growth of 21%, reaching RD$2.3 trillion, the institution indicated in a statement.
The loan portfolio, which increased 7% in the last year, did not stop growing during the pandemic. In fact, it expanded by 4.6% between March and October of the current year.
The system’s interannual delinquencies increased from 1.7% to 2.1%. Despite the increase, the historical perspective allows it to be classified as low. Currently, for every 100 pesos of delinquent loans, the banking system has 173 pesos in reserves, an increase of 15% compared to October 2019.
83% of the liabilities correspond to public deposits. These went from RD $ 1.50 billion to RD$1.77 billion, for year-on-year growth of over 18%. It is important to highlight that the deposits of families and households represent 58.1% of the total, while those of companies in the real sector reach 26.3%. Both increased their relative participation by 0.4% and 2%, respectively.
Meanwhile, interest rates are in the lowest range in contemporary history. Liabilities closed the month of October at 2.9% (annual weighted average), while assets fell by around 10%.
In this context, liquidity remains at historically high levels. The funds available for the sector went from RD$287 billion to RD$396 billion, for year-on-year growth of 38%.
The dollarization rate of the system remains unchanged. As of October 2020, bank liabilities in foreign currency represented 31% of the total, a value that, despite the acceleration in the appreciation of the dollar during the first half of the year, is only two points behind the 29% registered in October 2019.
The solvency of the Dominican banks stood at 20.4%, reflecting a significant increase compared to October 2019 (16.8%). The most important component in the variation of the system’s equity is the capital increase for an amount of RD $ 28,000 million. This includes around RD $ 20,000 million for capitalization of profits and RD $ 8,000 million for new contributions.
The profitability of the banking sector shows a year-on-year reduction. Return on Assets (ROA) and Return on Capital (ROE) stood at 1.9% and 16.8%, respectively, while in October 2019 these indicators were 2.4% and 20%.
Regulatory flexibility and facilities granted by entities
Regulatory flexibility, monetary policy stimuli, and the facilities granted by Dominican banks to their clients explain part of their healthy position in the context of the COVID-19 pandemic.
82% of the commercial banking loan portfolio is subject to special regulatory treatment, and RD$729,950 million were subject to a deferral of installments (57% of the system).
As of October, the deferral of payments reached 92% of the cases. To date, this segment has not faced major problems, since delinquencies have remained low.
However, it is necessary to consider that there is a natural lag in the transmission of the effects of the real economy to the financial sector. The easing measures have made it longer, in line with the intention of the monetary authorities to prevent an economic crisis from turning into a financial crisis.
Finally, there is still great uncertainty regarding the future, and especially regarding what will happen in 2021 in the financial sector. The sustained constitution of new provisions could be associated with the fact that the sector foresees higher levels of losses in 2021, and shows signs of prudence from the entities.
Source: Diario Libre[:]