República Dominicana es de los pocos países de América Latina y el Caribe a los que el Banco Mundial no le varió –ni disminuyó, como hizo para casi dos decenas de naciones- su proyección de crecimiento para este 2022, en su más reciente informe “Perspectivas económicas mundiales”.
El organismo multilateral mantiene la proyección de crecimiento del país en 5.0 % para este 2022 y también para el próximo año, tal como lo indicó en un informe similiar publicado en enero del presente año.
Sin embargo, proyecta una caída de -0.4 % para la economía haitiana en este 2022, de la que no indicó ningún crecimiento en su informe en enero.
El Banco Mundial señala que, “como agravante de los daños provocados por la pandemia de COVID-19, la invasión rusa a Ucrania ha exacerbado la desaceleración de la economía mundial, que está entrando en lo que podría convertirse en un período prolongado de escaso crecimiento y elevada inflación”.
Alerta que este contexto aumenta el riesgo de estanflación (periodo de alta inflación combinado con un estancamiento económico), “con consecuencias potencialmente perjudiciales tanto para las economías de ingreso mediano como para las de ingreso bajo”.
En su más reciente informe, el banco prevé que el crecimiento mundial descienda del 5.7 % en 2021 al 2.9 % en 2022. Este es un porcentaje menor que el 4.1 % que anticipó en enero.
Prevé, además, que oscile en torno a ese ritmo durante el período 2023-2024, a medida que la guerra en Ucrania afecte la actividad, la inversión y el comercio en el corto plazo; la demanda reprimida se disipe, y vayan eliminándose las políticas monetarias y fiscales acomodaticias.
América Latina y el Caribe
El Banco Mundial mantiene prácticamente inalterada su previsión de crecimiento económico para Latinoamérica y el Caribe este año. Bajó únicamente en una décima el porcentaje de crecimiento previsto para la región: del 2.6 % proyectado en enero al 2.5 % actual.
Pero, redujo la previsión para el próximo 2023, que había situado en enero en 2.7 % y la rebajó hasta 1.9 %, antes de repuntar ligeramente a 2.4 % en 2024.
Solo para el Caribe, proyecta un crecimiento de 6.9 % en 2022 y un 6.5 % en 2023, favorecido por la recuperación del turismo.
Inflación y política monetaria
El banco analiza que “la inflación ha aumentado muy por encima de las metas de los bancos centrales en muchos países de América Latina y el Caribe y ha ejercido presión financiera sobre los hogares”.
Señala que las medidas generales para enfrentar la inflación, así como los precios de los alimentos y los combustibles, se han acelerado rápidamente. “En respuesta, las autoridades monetarias han subido significativamente las tasas de interés oficiales y han indicado que se producirán nuevos aumentos”.
El Banco Central de la República Dominicana ha aumentado de forma gradual su tasa de política monetaria en cinco ocasiones desde noviembre de 2021, hasta situarla a como está actualmente: 6.50 % anual.
“La escasez global de fertilizantes vinculada a la guerra de Ucrania podría exacerbar el aumento de los precios de los alimentos, lo que provocaría malestar social”, advierte el Banco Mundial.
Estima que la inflación podría permanecer muy por encima de las metas de los bancos centrales, “por lo que sería necesario un endurecimiento de las políticas monetarias más rápido, lo que podría precipitar una desaceleración regional aún más pronunciada”.
Agrega que, en un contexto de crecimiento lento y aumento de las tasas de interés en Estados Unidos, la tensión financiera podría afianzarse en algunas economías de la región.
Proyecta que los precios de las principales exportaciones de América Latina y el Caribe serán sustancialmente más altos en 2022, “pero los beneficios para el crecimiento se verán limitados por una respuesta lenta de la producción de algunos productos básicos y por el aumento de los costos de los insumos, incluidos la energía y los fertilizantes”.
Fuente:
Diario Libre